ACDgal solicita a la Xunta que se inicie la desescalada para los centros de día

La asociación remite un documento con propuestas específicas a la Dirección Xeral de Atención Integral Sociosanitaria, que se compromete a estudiar esta posibilidad.

La Asociación de Centros de Día de Galicia (ACDgal) ha solicitado a la Xunta que se inicie el proceso de desescalada dentro de los centros de día privados de la comunidad autónoma. Esta propuesta fue realizada en una reunión mantenida entre la directiva de la entidad con la Consellería de Política Social.
Durante el encuentro, la presidenta de ACDgal, Ángeles Álvarez, trasladó la “urgente necesidad” de llevar a cabo dicho proceso de desescalada. “Las personas usuarias han tenido que adaptarse a medidas muy restrictivas, desde su incorporación al servicio en el mes de julio de 2020. La aplicación de las mismas, han supuesto un perjuicio que les ha afectado significativamente a su desarrollo personal”, explicó. Es por ello que, en palabras de Álvarez, “urge acelerar el proceso de vacunación al máximo” para llevar a cabo “unas medidas iniciales en una desescalada segura que les permita recuperar hábitos y actividades perdidas e importantes para su día a día”.
 Además, comenta “que las personas mayores son conscientes del marco temporal y limitado de vida. Una percepción que no tienen los jóvenes y que a ellos les afecta directamente. No es lo mismo perder un año de vida con 40 que con 90”.
Desde ACDgal, y a petición de la Dirección Xeral de Atención Integral Sociosanitaria, se ha remitido un documento en el que la asociación realiza propuestas para hacer efectiva la desescalada en los centros privados de Galicia. Una iniciativa que desde este Departamento autonómico se han comprometido a estudiar para concretar las posibilidades de llevarla a cabo.
En el documento, ACDgal indica que, una vez se haya completado “el proceso de vacunación, y teniendo en cuenta la opinión de los expertos” se puedan poner en marcha diversas medidas. Entre ellas, “eliminar la distancia interpersonal de 1,5 y 2 metros entre grupos, salvo en las horas de las comidas, donde se mantendría; permitir las salidas en pequeños grupos para dar paseos en el exterior; limitar el control de síntomas (toma de temperatura entrada y salida), realizando este control, solo cuando se observen signos y síntomas de malestar o queja de la persona usuaria” y “ampliar el aforo”, continuando con grupos burbuja estables.
Esta desescalada estaría igualmente marcada por el mantenimiento de las medidas de prevención ya establecidas como el uso de mascarilla, pantallas, higiene de manos y desinfección calzado con alfombras, entre otras. Además, se seguirían llevando a cabo todas las medidas de desinfección de espacios, así como tareas que minimicen riesgos de contagio en las instalaciones de los centros de día: limpieza, desinfección de superficies, desinfección del baño en cada uso, ventilación, uso de mamparas, no visitas personas ajenas, etcétera.
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